1. El Imperio Carolingio.
A finales del siglo VIII, Carlomagno, rey de los francos, unificó gran parte de las tierras de Europa Occidental. Se proclamó emperador en el año 800 como los antiguos emperadores romanos. Elaboró leyes y organizó sus territorios por medio de provincias gobernadas por Condes.
A la muerte de Carlomagno el imperio se dividió en tres reinos entre sus tres hijos en el Tratado de Verdún, en el 843, desapareciendo para siempre e iniciando luchas por el poder entre reyes y condes.
2. Las segundas invasiones.
Además de estos problemas, una serie de pueblos realizaron ataques e invasiones en los siglos IX y X. Los normandos (Vikingos) por el norte, los musulmanes por el sur, y los húngaros por el Este.
3. La ceremonia de embestidura.
A finales del siglo VIII, Carlomagno, rey de los francos, unificó gran parte de las tierras de Europa Occidental. Se proclamó emperador en el año 800 como los antiguos emperadores romanos. Elaboró leyes y organizó sus territorios por medio de provincias gobernadas por Condes.
A la muerte de Carlomagno el imperio se dividió en tres reinos entre sus tres hijos en el Tratado de Verdún, en el 843, desapareciendo para siempre e iniciando luchas por el poder entre reyes y condes.
2. Las segundas invasiones.
Además de estos problemas, una serie de pueblos realizaron ataques e invasiones en los siglos IX y X. Los normandos (Vikingos) por el norte, los musulmanes por el sur, y los húngaros por el Este.
3. La ceremonia de embestidura.
Los monarcas (reyes eran muy débiles para afrontar tantos problemas), No podían proteger a la población, ni mantener fieles a sus condes, ni recaudar impuestos, ni formar ejércitos. Para poder mantener unido su reino tuvieron que negociar con los nobles con los que establecieron un sistema de vasallaje.
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